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Algunos apuntes que tal vez a alguien puedan ser útiles.

martes, 28 de enero de 2014

Quiero ser padre.

Afortunadamente entre los hombres es poco lo que se platica de este tema. Eres o no eres. El resto apenas nos importa.

Lo que no significa que no sepamos del miedo a no poder cumplir con la responsabilidad que lleva esa palabra. ¡Claro que lo sabemos! Eso es lo que nos paraliza, nos hace decir verdaderas tonterías en los momentos menos apropiados y nos hace trabajar como idiotas todo el día y parte de la noche. Para llegar cansados, con ese miedo, alerta a cualquier posible nuevo problema y más y más deseosos de poder asegurarnos que nuestros hijos estén bien.


No voy a negar la existencia de los otros hombres. Esos que hace rato dejaron a un lado la palabra padre para quedarse con la de semental. Hay los que decidieron que sólo tienen una familia, dos, tres, pero muchos “hijos” de los que no tiene responsabilidad porque “fue cosa de la vieja pendeja y no mía embarazarse”. Entre las familias de mis alumnos he tenido muchos casos de esos, me dan asco porque quiero ser padre y esos tarados no aprovechan la oportunidad de serlo.

Bromas pesadas sobran acerca de eso de que “te amarran con el hijo” y dentro de lo cruel que suena ese chiste, las mujeres deberían notar que tiene guardado ese miedo del que hablo y mi mujer escribe.

Señoras, nosotros no tenemos “Baby Shower”. Mis amigos reciben más esa broma sexista que una invitación a compartir con las mujeres esa “maravillosa alegría” de tener un hijo. Una vez traté de acompañar a mi esposa y las miradas que me lanzaron todas las invitadas (y la celebrada) bastaron para que me sintiera una rata en una pastelería. Por favor, tengan en cuenta eso cuando critiquen a los hombres por no expresar su alegría como ustedes.

Incluso de chavos sentimos eso. Y el miedo se convierte en deseos de pelear contra esa responsabilidad, el miedo genera el deseo de huir. Y así sigue la cadena.

Quiero ser padre. Llevar a mi hija al cine, revisar sus cuadernos, pasear con ella y mi esposa por la ciudad, leerle, regañarla, desvelarme cuando se enferme, comprarle la muñeca esa rara que no se de qué programa sale, quejarme de su música, tratar de compartirle la mía, odiar a sus novios, preocuparme por que salió y no se ha reportado, ser árbitro entre mi esposa y ella, ser víctima de mi esposa y ella. Despedirme de ella en la universidad  creyendo que volverá a casa, odiar a su marido, amar a sus hijos.

Pueden ver que en esa corta lista no incluí el embarazo de mi mujer, ni los chillidos del bebé. Yo se que esos son momentos “mágicos” que se desvanecen. Siempre me ha ganado la ternura de esa etapa, me encanta cargar los bebés de mis parientes, de mis amigos. Irme a mi casa y fantasear con mi mujer acerca de cómo les irá en la escuela, cuando mi conocimiento y el carácter de mi esposa son más afines.

Amo a mi esposa. Llevamos más de diez años viviendo juntos y la conozco, la he visto soñar despierta con nuestra hija, notado cómo su mirada sigue a una niña en el parque, en el cine; escuchado sus comentarios que se escapan cuando pasa por una juguetería, cuando le hablo de alguna alumna o convive con sus sobrinas.

Ha diseñado el cuarto de nuestra hija tantas veces como nos hemos cambiado de casa, visto alguna donde podríamos vivir, o cuando ve algo en un catálogo. 

Hace años, al desesperarse por no poder hablar con la gente cercana acerca de nuestra idea de adoptar, le comenté que TAL VEZ  podría compartirlo con desconocidos en un blog.

Ya conocen el resultado de esas palabras.

Quiero ser padre. Y se que muchos hombres tiene esa misma idea. Es por eso que hay películas que se vuelven inolvidables, Que reflejan bien ese deseo de poder evitar que cualquier cosa mala les pase a nuestros hijos. O, en su defecto, de asegurarnos que quien les haga daño lo paguen. En esas mismas películas verán el lado opuesto, porque reconocemos que existe. Y es por eso que le dije a mi esposa que escribiera acerca de mi punto de vista, en lugar de estarse peleando con la gente que no quiere entender el de ella.




Señoras. Los hombres merecemos la oportunidad de valorarnos como padres, no sólo como los que dan el espermatozoide y el dinero. Por eso me gusta que al ser un matrimonio el que va a adoptar, se pidan tantos requisitos, así se elimina el pretexto de que sólo uno de los dos quiere tener hijos. Y espero que en un futuro mi mujer pueda cambiar el nombre del blog y escribirles de nuestra hija. 

Quiero ser madre.

Ya estoy más cerca de los cuarenta que de los treinta y tantos años. Eso hace que la mayoría e la gente piensen inmediatamente que soy infértil, o que mi pareja lo es. La verdad es que no tenemos la menor idea de si tenemos o no posibilidad de engendrar hijos biológicos y nunca nos ha llamado la atención eso de “tratar”. Pertenecemos a la mentalidad de que el sexo no es solo para reproducirse.

Quiero ser madre, compartir con mi hija la experiencia que me han dado mis errores, el tiempo que pueda, el conocimiento que ella quiera, acompañarla a leer, aprender con ella lo que es maquillarse, gritar juntas en campo abierto, regañarla, consentirla, discutir acerca de si comeremos en casa o fuera, ser su conejillo de indias, vigilarla de lejos cuando esté con sus amigas, discutir con sus maestros, desvelarme, preocuparme, cantar con ella, renegar de su música, amenazar a su novio, buscar con ella los materiales de la escuela, ver escuelas, jugar con ella. Quiero lo único que no sabré si será un sueño o una pesadilla hasta que suceda. 

Dicho esto, y después de que algunas personas me acusan de que no respeto el deseo de mi marido de ser padre, lo que vuelve a ser un chantaje bastante barato porque desde tiempos de mi tatartatartaaaatarabuela los hombres dejan sus genes desperdigados y generando problemas sin que por eso sean padres de tanto crío. Me dicen que no puedo afirmar que quiero ser madre cuando no quiero pasar por la etapa del embarazo (donde realmente se da el amor materno) y por los primeros meses y años del hijo en cuestión. 

He visto entre mi propia familia, leído noticias, y hablado con suficientes madres biológicas, además de estudiado el tema desde muchos artículos científicos como para poder reírme desde ese punto. Los meses de embarazo a muchas las “pesca de sorpresa” el miedo a que la sociedad las rechace cuando son antes del sacrosanto pedazo de papel (y rito y fiesta) que los define como matrimonio (verdadera pareja) ha hecho que rechacen durante varios meses de ese “dichoso” hijo sorpresa.

Por supuesto que esos meses son el proceso para adaptarse a la idea de que la vida ya cambió, que se producen hormonas que aceleran la empatía hacia el no nacido, que la gente hace cuanto puede por animar a la mujer (y burlonamente consolar al hombre, admitan el sexismo en esas fiestas y conversaciones) y que al notar la criatura tan vulnerable que sale de ellas el instinto materno aflora.

Solo dejaré enlaces de un caso que sirve como el cuervo blanco de esa teoría. Una chava que estudió docencia. Puede notarse que habla de lo que ella siente en el cuerpo, no se la responsabilidad que estaba por asumir con otra persona.  







Volviendo a lo que digo de querer ser madre.

Me avisan que adoptar es muy complicado, que hay mucha gente interesada y muy pocos bebés disponibles. Mi compañero sonríe nervioso porque sabe bien, como cualquiera que revise el blog, que llevo años sabiendo lo complicado que es adoptar. De hecho el blog fue creado para ayudar a que quienes viven con esa idea, al igual que una, tengan al menos un referente entre los muchos que pueden encontrar en internet. La persona e la conversación ficticia que les narro siendo el resumen de muchas tenidas estos años, insiste en que es más fácil engendrar, que se requieren menos documentos y tiempo de espera.

“Es que no se parecerá a ustedes”.

“Es que deberían por lo menos intentarlo”.

“Es que tal vez ustedes piensan que no tienen oportunidad, pero capaz que el hijo les nace después de  adoptar y ya no lo quieren igual”.

“Es que pues, no es lo mismo”.

Esas y otras variantes de la misma necedad se repiten mientras mi compañero busca cambiar el tema, toma soda, café, cerveza, agua ¡Lo que sea! Con tal de tener pretexto para quedarse callado y me mira con la advertencia de que la persona que trata de convencernos no tiene las neuronas suficientes para entender que los bebés crecen.

Y que yo quiero adoptar una niña. Al decirlo no me refiero a su género (o diría hembra) sino una niña, alguien ya con años de vida, definiciones propias de muchas cosas y una personalidad que ya está en pleno desarrollo.

“Entonces te quieres ahorrar todas las dificultades de tener un bebé. Eres una floja que no quiere batallar”.

En este punto, mi lenguaje cambia a según la supuesta confianza que le tenga a la persona. Que para ese momento ya le digo (mentalmente la mayor parte de las veces) pendeja.

 Adoptar es tan fácil como pasar un examen socioeconómico, uno psicológico, que un extraño investigue tu vida, tus amistades y familiares, que entre a tu casa para ver si dispones del espacio suficiente, de los elementos dignos, del tiempo y el respeto que tener un hijo exige. Tan tranquilo como ser vigilado durante cerca de un año para ver si en verdad puedes ser legalmente el padre de la persona desconocida que te presentarán y tendrán bajo observación desde ese instante hasta que los convenzas.

Adoptar es tan fácil que debes ir a cursos, prepararte para tener un psicólogo cerca que te asesore acerca de los problemas sin resolver que vengan en esa caja de Pandora que llamarás “tu hijo” y al que deberás  proteger de todos los prejuicios y traumas que la gente que los rodea puedan tener.

Adoptar es tan fácil que por eso no hay niños que han crecido esperando tener una familia lo más parecida posible al ideal.

A estas alturas, mi marido ya se fue a lavar su vaso, servirse otra cosa o ver si la mosca voló a la cocina o la recámara o el patio. Sabe que viene el comentario más idiota, el que me obliga a quedarme callada de rabia y tristeza y que hace que la mayoría de esa gente se vaya satisfecha de su sagacidad. Pues llevo más de diez años de matrimonio.

Si quisieras ser madre. Ya tendrías a tu hija. 


martes, 14 de enero de 2014

Los niños pueden denunciar en la ONU

Ginebra.- El Fondo de Naciones Unidas para la Niñez (UNICEF) celebró que los niños podrán presentar denuncias directamente ante el Comité sobre los Derechos del Niño de la ONU, asegurando así su derecho a que se les escuche.

El Tercer Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño relativo a un Procedimiento de comunicaciones protege el derecho de los niños a buscar reparación a las violaciones de sus derechos, explicó UNICEF en un comunicado.

Con la ratificación de Costa Rica, este instrumento jurídico fundamental entrará en vigor en abril de 2014.

Según el protocolo, los niños podrán, como individuos o en grupo, presentar denuncias sobre violaciones específicas a sus derechos en virtud de la Convención sobre los Derechos del Niño o el Protocolo Facultativo relativo a los niños en los conflictos armados .


Asimismo podrán presentar sus denuncias sobre violaciones que conciernen al Protocolo facultativo relativo a la venta de niños, la prostitución infantil y la utilización de niños en la pornografía.

El Tercer Protocolo Facultativo fortalecerá la rendición de cuentas, no sólo al ayudar a determinar las lagunas en los sistemas judiciales relativos a los niños a nivel nacional, sino también al apoyar a las instituciones independientes de derechos humanos de la infancia, como se pide en la Convención sobre los Derechos del Niño.

Esta Convención, que entró en vigor en 1989, es el tratado de derechos humanos más ratificado de la historia, y refleja un consenso entre los gobiernos del mundo de que hay normas mínimas de las cuales todos los niños deben disfrutar.

En el marco del nuevo Protocolo, sólo aquellos niños cuyos gobiernos hayan ratificado el Protocolo Facultativo relativo a un procedimiento de comunicaciones pueden presentar sus quejas ante el Comité de la Convención.

Todos los Estados Partes en la Convención y sus tres protocolos facultativos tienen la obligación de facilitar los mecanismos disponibles para todos los niños, y realizar un esfuerzo para incluir a los más vulnerables, en especial niños excluidos y marginados como son los niños con discapacidad, indígenas y de las minorías.

El Comité de los Derechos del Niño podrá tomar medidas para proteger a los niños que presenten denuncias contra cualquier posible represalia, solicitando al Estado que adopte medidas provisionales para proteger al niño o grupo de niños.

"En el caso de que se llegue a la conclusión de que el Estado ha violado la Convención, el Estado estará obligado a aplicar las recomendaciones que ha realizado el Comité", enfatizó.

El Comité de los Derechos del Niño está integrado por 18 expertos independientes de derechos humanos internacionales que supervisan la aplicación por los Estados parte de la Convención y los Protocolos Facultativos.

Los países que han ratificado el Protocolo Facultativo hasta la fecha son: Albania, Alemania, Bolivia, Costa Rica, Gabón, Eslovaquia, España, Montenegro, Portugal y Tailandia.



Fuente:http://www.oem.com.mx/elheraldodechihuahua/notas/n3256523.htm

jueves, 2 de enero de 2014

Compartir la lectura y el deseo de conocimiento.


Generalmente, los padres no tienen un plan determinado para la enseñanza del lenguaje de sus hijos, no sientan a los niños en un pupitre para que escuchen clases de lenguaje, ya que los niños aprenden naturalmente mediante la repetición de lo que escuchan. Los padres actúan como simples asesores de sus hijos dándoles ejemplos de lo que desean que reproduzcan y dejándolos aprender por sí mismos sin interrupciones constantes.

El primer entorno de aprendizaje es el que el niño puede explorar por sí mismo. Esto no funciona así en la mayoría de los aprendizajes escolarizados y la lectura es uno de ellos. Es importante que los padres mantengan una estrecha vinculación con el maestro y la escuela en el desarrollo de este proceso y que en el hogar tomen en cuenta las siguientes consideraciones.

Actividades

Pasar tiempo juntos

  • Leer juntos: Busquen tiempo para leer juntos y hablar sobre los libros que han leído. Si disponen de tiempo extra durante las vacaciones, lean un libro más largo en voz alta, como por ejemplo, un libro de capítulos o una novela infantil. Disfrutarán del tiempo que pasen juntos y de descubrir un buen cuento.
  • Contar cuentos: Aproveche la época de fiestas para contar historias de su niñez. Pida a sus parientes y amigos que compartan sus historias también. El escuchar historias ayuda a los niños a mejorar su lectura. Además, las historias familiares son una parte importante de la herencia de su hijo.

En la biblioteca

  • Visitar la biblioteca: Averigüe las horas de la biblioteca durante las vacaciones, y, si tiene tiempo, lleve a sus hijos a la biblioteca. Dele tiempo a sus hijos para revisar algunas selecciones en el área infantil. ¡Es el momento perfecto para ver lo que hay en los estantes!
  • Aprender sobre nuevas tradiciones y fiestas: Busque libros infantiles o artículos en Internet sobre sus propias fiestas, tradiciones especiales y otras celebraciones invernales. Tal vez su hijo le puede interesar aprender algo sobre las celebraciones de la navidad otras partes del mundo.

El regalo de la lectura

  • Dar libros: Regale a su hijo un libro para las fiestas. No tiene que ser nuevo, puede compartir un libro favorito suyo o buscar un libro antiguo e interesante en una tienda de libros usados. Si sus parientes buscan ideas sobre un regalo, pídales este año que regalen un libro.
  • Buscar otros regalos relacionados con la lectura y la escritura: Dé a su hijo algunos cómics, revistas o unas tarjetas especiales para escribir cartas. Es un buen momento de buscar algo relacionado con los intereses de su hijo, como los deportes, la naturaleza y el arte.

Viajes familiares

  • Volver divertidos los viajes: Si van a viajar durante las vacaciones, busque mapas y libros turísticos sobre su destino. Ambos son una buena manera de prepararse para el viaje — ¡y para pasar el tiempo en el coche o el avión!
  • Libros en audio: Si van a estar en el coche durante viajes largos, alquile libros audibles en la biblioteca. Pida a su hijo que le ayude a escoger los libros para el viaje.

Ideas de escritura

  • Escribir cartas y notas de agradecimiento: Ayude a su hijo a escribir cartas o correos electrónicos a sus parientes y amigos. Indique a su hijo cómo escribir notas de agradecimiento para sus regalos nuevos.
  • Hacer listas: Pida a su hijo que le ayude a escribir listas de compras, ideas de actividades o los horarios de televisión y películas, lo cual es una buena práctica para la escritura — ¡y una gran ayuda para los adultos también!

  • Evitar la crítica y comentarios negativos sobre las habilidades de sus hijos. Llamarlos lentos o flojos, pueden crear en ellos una predisposición al fracaso. Nunca deberán hacerse comparaciones negativas entre niños.
  • Fomentar la persistencia, no la maestría, y animar a los niños a que aprendan de sus propios errores.
  • No castigar los errores ni amenazar con no quererlos más si no alcanzan las metas propuestas.
  • Dejar que los niños determinen su propio ritmo de aprendizaje y estar siempre dispuestos a ayudarles en la resolución de sus dudas.

Recursos que facilitan el desarrollo de la enseñanza de la lecto-escritura
  • Material elaborado por los niños: carteles, anuncios, mensajes, frases.
  • Juegos de lectura: Palabras perdidas en una frase u oración, loterías, palabras y frases dentro de una caja para sacar al azar y leerlas en grupo, dominó de letras y palabras, etcétera.
  • Ejercicios para desarrollar la comprensión lectora: Descubrir absurdos, interpretar dibujos e historietas, dibujar un texto leído, dibujar instrucciones o pasos para hacer algo, seguir órdenes por escrito, etcétera.

Lectura conjunta
     La lectura es una herramienta fundamental para la vida, pero aprender a leer no es ninguna carrera, cada niño o niña tienen sus propios tiempos, no importa tanto cuándo empiecen a leer los niños, sino que aprendan a disfrutar con ello.

     Así, el papel de los padres no es enseñar a sus hijos a leer, sino ayudarles a que aprendan.

     Estos son algunas de las tareas con las que se puede ayudar a aprender a leer:
1. Formar una pequeña biblioteca de libros interesantes en el hogar y llevar a los niños a efectuar visitas a bibliotecas públicas. Los libros para los niños deben reflejar el lenguaje cotidiano.
2. Leer a los niños mientras ellos miran las ilustraciones y el texto. Con el tiempo, los niños se anticiparán a algunas frases y más tarde intentarán leer ellos mismos.
3. Permitir que los niños determinen la velocidad de la lectura y elegir el momento en que se sientan a gusto realizando esta actividad.
4. Dejar que los niños cometan errores sin interrumpirles y corregirles constantemente. Casi todos los niños vuelven al inicio de la frase y corrigen sus propios errores.
5. Si los niños solicitan ayuda, darles pistas en lugar de decirles toda la palabra; los niños aprenden el significado por el contexto.

     En el acceso del niño al mundo de la lectura, la actitud de padres y maestros juega un papel fundamental, de ella depende que el tránsito del niño por este nuevo mundo sea liberador y no una fuente de conflicto y frustración.

Fuentes:

Los niños que nadie quiere. Reportaje.


Inició un nuevo año. 
Espero que todo mejore para cada una de esas familias. Y para la nuestra, con mi pequeña desconocida. 
Este reportaje lo encontré en:


A pesar de que hay cientos de personas que desean adoptar un niño en Chihuahua y que los albergues para los menores tienen una población de varios miles de pequeños que desean una familia, la realidad es que las más de 200 parejas que integran la lista de espera para poder ser padres, buscan niños con ciertas características, ya que buscan que sean menores de cinco años, y que de preferencia no tengan rasgos tarahumaras.

En este mes, una pequeña, la cual fue bautizada por el Gobernador del Estado, como Antonia, debido a que fue abandonada en el templo de San Antonio de Padua, llamó al atención de toda la sociedad, debido a que la pequeña fue dejada en un día particularmente frío, pero gracias a que la localizaron rápidamente fue posible salvarla.

En medio de la tragedia que puede significar que una bebé qua había nacido tres horas antes, sea abandonada, surgió el interés de decenas de parejas que desean convertirse en sus padres. 

Según comentó Gerardo Villegas, director general del DIF Estatal, en las primeras horas del día siguiente que fue abandonada, el DIF Estatal recibió la llamada de unas 30 parejas que desean darle un hogar a la menor, por lo que en menos de un mes podría estar con una nueva familia.

Expuso que la pequeña fue llevada a las instalaciones de la Casa Cuna, en donde será cuidada en lo que se determina si es posible darla en adopción, aunque también existe la posibilidad de que haya familiares que la reclamen.

Destacó que antes de iniciar los trámites se debe descartar que la menor haya sido robada, ya que no es posible determinar si quien la abandonó fue la madre u otra persona, pero estas indagatorias serán efectuadas por la Fiscalía del Estado.

Mencionó que en lo que va de la administración estatal este es el segundo caso de un niño que es abandonado de esta manera.

Recalcó que en este tipo de casos el comité de adopciones opta porque el niño sea entregado a una familia de otra ciudad, debido a que su situación ha sido ventilada en los medios, lo que atenta contra su intimidad.

Añadió que la lista de espera de las personas que desean adoptar actualmente es de 200, por lo que será sencillo encontrar una buena familia para la pequeña. Por su parte, la presidenta del DIF Estatal, Bertha Gómez de Duarte, precisó que la niña será atendida por médicos, recibirá los cuidados alimenticios, monitoreo constante de su salud y el área jurídica se encargará de las cuestiones legales e investigación correspondiente.

Lamentó las condiciones en que fue encontrada la menor debido a que fue expuesta su integridad física y de salud, mencionó que agraciadamente la niña fue encontrada con bien y afortunadamente fue rescatada.

Chihuahua dejó de ser el número uno en adopciones 

Hasta el año 2012 el Estado de Chihuahua ocupaba el primer lugar nacional en adopciones, pero este año se redujeron a un 36 por ciento.

Durante el 2010 fueron dados en adopción 85 niños y 86 en el 2011, es decir un promedio mensual de siete; este año hubo un promedio mensual de 4.5, ya que en los primeros cuatro meses fueron 18, informó la titular de la Procuraduría de Asistencia Jurídica y Social.

Esto se debe a que la política de esta administración estatal no es dar los niños ni buscar que sea Chihuahua el primero a nivel nacional, ya que no es un lugar del que se pueda sentir orgulloso, dijo la funcionaria.

Se busca que los padres se hagan responsables, para reinsertar a esos niños en su hogar, con terapia familiar, individual y escuela para padres.

Sólo en la ciudad de Chihuahua hay 200 solicitudes para adoptar, pero están en lista de espera porque la mayoría pide menores de cinco años, y la mayoría son mayores de seis años.

Hay discriminación de indígenas, porque hay solicitantes que piden con ciertas características físicas, sin embargo, la mayoría de ellos son tarahumaras, detalla la información.

Los solicitantes se desesperan durante el proceso, pero sólo para ganar la patria potestad es un juicio que dura en promedio seis meses, además de que debe comprobarse que el menor encaja por sus características con la familia. Se busca una familia para el niño, no un niño para la familia.

También es muy común que los adoptantes pidan pequeños sanos y muchos de ellos tienen algún problema porque vienen de familias disfuncionales donde no eran bien atendidos, y es otra limitante para encontrarles una familia.


La espera 

El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia DIF, tiene a su cargo infantes candidatos a adopción mayores de siete años y una cantidad similar de pequeños con discapacidad que están listos para vivir en un hogar con una familia.

Mientras llegan los nuevos padres, dentro de las actividades que se realizan en el albergue con estos niños, esta la visita de un grupo de estudiantes y profesionistas quienes se visten de payasos y princesas para llevarles alegría, globos y un rato de diversión.

La vida en el albergue

En el estado de Chihuahua hay tres mil 420 niños que viven en casas hogar, orfanatos o la casa cuna del DIF estatal ante la ausencia de familiares que se hagan cargo de ellos, los cuales están bajo la responsabilidad de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia.

De mil 120 menores, el Gobierno juega el papel de “padre” ante la ausencia de familiares que los acojan.

Los otros dos mil 300 niños que sí tienen a sus padres, viven en casas hogar, con los cuales suman tres mil 420 los menores que no viven en una familia tradicional en su casa.

Los padres que trabajan como jornaleros, y que se les dificulta llevar a los niños a la escuela porque se mueven de ciudad o pueblo muy seguido, las madres trabajadoras que no pueden cuidar a sus niños, u otras situaciones son las que orillan a los padres a llevarlos a albergues, algunos niños, durante meses, no ven a sus padres, incluso hay quienes los dejan injustamente por años, hasta por la comodidad de no mantenerlos, sin visitarlos ni enviarles nada, según comentaron varios albergues.

De acuerdo con el último censo del DIF estatal, hay en la entidad 94 organizaciones civiles, entre albergues, casas hogar y centros de rehabilitación, en tanto que la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Coespris), cuenta con un censo de 40 albergues para niños, ya sea de manera temporal o de estancia permanente, dijo Mirella Estrada Tarango, coordinadora general del Sistema Estatal Sanitario de la Coespris.

Ambas dependencias verifican la operación de estos lugares que son todos, excepto la casa cuna, asociaciones civiles registradas como lugares de beneficencia, y que operan con la ayuda de donativos y de gobierno, resaltaron las funcionarias.

El DIF estatal verifica el estado emocional y la situación jurídica de los menores internos, y en caso de encontrar alguno con problemas, les busca un nuevo lugar, sin embargo, no tiene facultades para sancionar o cerrar el lugar.

La Coespris es quien sanciona y puede llegar a la clausura temporal o definitiva de los albergues, y los verifica de manera sorpresiva al menos dos veces al año, y por denuncia o queja, anónima o no, se puede hacer una verificación en cualquier momento, 

Para la capital del estado la Coespris cuenta con 15 verificadores, en su mayoría médicos y en el resto del estado trabajan otros 30, quienes tienen facultades para aplicar sanciones económicas que alcanzan hasta los 60 mil pesos, sin embargo, en busca de que corrijan las irregularidades en caso de que se les encuentren, se les da oportunidad de unos días, y si a la segunda visita no se corrigió, entonces cierra hasta que lo hagan, cuando se trata de irregularidades menores, ya que cuando son mayores, ocasiona la clausura inmediata y definitiva del lugar, mientras tanto, el DIF dispone de esos niños en otro lugar.

Moisés Yáñez, titular de la Coespris, señala que los verificadores de la dependencia a su cargo trabajan en coordinación con DIF estatal y Derechos Humanos con el fin de que cada quien actúe conforme a las facultades legales de cada dependencia tiene, ya que mientras unas no pueden sancionar, otras no pueden hacerse cargo de los niños, por lo cual, ha sido necesario asistir los verificadores de las tres dependencias en grupo. 

En Chihuahua hay solo un centro de rehabilitación para menores, el cual opera con reglas muy distintas a las casas hogar u orfanatos, en éste deben tener registrado qué tipo de tratamiento médico y sicológico se les da a los niños, así como un doctor responsable que administre los medicamentos en caso de que se empleen para la desintoxicación y/o rehabilitación de los menores. 

Entre las reglas para todos los lugares donde se albergan menores, es que no deben mezclar a los mayores de 11 años con los menores de esta edad, ni a mujeres con hombres, con el fin de que no se preste a abusos por parte de los más grandes, en tanto que los sicólogos del DIF estatal verifican los tipos de juegos que tienen y cuidan los temas de percepción sexual que se da al interior de los albergues, resaltó la procuradora de la defensa del menor.

Ambas instituciones vigilan la higiene de los lugares y la salud, así como las condiciones de seguridad en las instalaciones, que según Coespris, son centros que operan dentro de ley regularmente y cuando se les detectan anomalías son menores, donde sí han encontrado irregularidades que han llegado la clausura, es en guarderías, de las cuales se han cerrado dos este año.